CARREÑO INVESTIGARÁ LA REPRESIÓN FRANQUISTA EN LAS CONSERVERAS

• El Ayuntamiento solicitó fondos europeos para un proyecto documental y bibliográfico original, relativo a un episodio de la historia social de Carreño íntimamente ligado al mundo de la pesca y la conserva: la represión franquista sufrida por las trabajadoras de las industrias de conserva candasinas durante la Guerra Civil, ejemplificada en el caso de “les Candases”.
• La periodista Marta Rogía, con la colaboración de Mari Luz Rodríguez, periodista y fotógrafa, y Patricia Bregón, fotógrafa impulsarán los trabajos documentales y de investigación para la elaboración de un nuevo trabajo editorial cuyo fin será la publicación de un texto en el que a través de la historia de “Les Candases” se analizará cual fue y es el papel de la mujer en la industria conservera. Estas 8 mujeres, fallecidas violentamente durante la Guerra Civil, eran trabajadoras de las fábricas de conserva, pero también madres, hermanas, hijas, suegras,… de obreros de las conserveras, lo que añade una visión más enriquecedora a su historia. El audiovisual correrá a cargo de J.K. Álvarez, director de cine asturiano y colaborador del READER, candidato a los premios Goya de este año. 

• El resultado de la labor documentalista e investigadora, una vez se concluya la publicación del libro y la elaboración del documental se presentarán en público, y, a partir de entonces, podrán consultarse y verse, en la antigua fábrica de conservas Ortiz, en el futuro Ecomuseo de la conserva de Asturias.

Este verano en Ortiz se mostrarán contenidos expositivos de cómo se concibe como el futuro equipamiento conservero que actuará también como centro de conservación, estudio y difusión, situado en la antigua fábrica Ortiz. Entre tanto, a sumar a la colección existente se pretenden crear nuevos contenidos para incluir en dicho proyecto.

“Una sociedad avanza cuando las desigualdades de género desaparecen, cuando las mujeres dejan de ser meras espectadoras y se convierten en protagonistas, en escritoras de la historia, cuando de una forma u otra forman parte activa de ella. No se trata de premiar batallas, ni proezas heroicas, porque la épica se encuentra en el día a día, si no de darle a cada persona su lugar y su espacio en el tiempo” – avanzó la Alcaldesa.

En torno a esta temática, el Ayuntamiento de Carreño solicitó una subvención para la grabación y montaje de un documental, y la elaboración y publicación de un libro monográfico con testimonios de familiares de las mujeres trabajadoras de las fábricas de conservas víctimas de la represión. Asimismo, se contempla en dicho proyecto la instalación en las calles de Candás de una placa de homenaje, en recuerdo de este grupo de trabajadoras de la industria conservera.

El proyecto municipal supone la puesta en valor del patrimonio de la industria conservera de Candás encaja en la definición de las categorías de patrimonio etnográfico y de patrimonio histórico-industrial de la Ley de Patrimonio Cultural de Asturias. Además, la ley indica que serán de especial recopilación y estudio los aspectos sociales de la industrialización y muy especialmente los relacionados con los cambios en la vida cotidiana y con la historia del movimiento obrero, incluyendo los correspondientes testimonios orales.

El Plan Director del Ecomuseo de la Conserva de Asturias recoge explícitamente la oportunidad de recuperar las fuentes orales para el equipamiento y la memoria colectiva. Dice así: “Se considera oportuno priorizar la recuperación de fuentes documentales y fuentes orales, imprescindibles para recuperar el pasado inmediato, así como la cultura de trabajo y la memoria colectiva. La recopilación de esta documentación permitirá, no solo conocer de primera mano el funcionamiento de una máquina o de una herramienta, sino también otros aspectos como por ejemplo la organización del trabajo en las fábricas, la división del trabajo entre hombres y mujeres, el trabajo infantil, el conocimiento técnico, ...”.

El consistorio carreñense avanza en esa dirección y recurre a fondos europeos para la investigación y creación de estos contenidos inéditos. Las inversiones plurianuales para las que se solicitó subvención son las siguientes:

• Elaboración del documental "La historia olvidada de les candases" promovido por Juan Carlos Álvarez López.
• Instalación de placa conmemorativa urbana en la plaza que lleva el nombre de Les Candases.
• Elaboración y publicación de monografía sobre “Les Candases” proyecto de Marta Rogía.

La primera fase de elaboración del documental (preproducción y rodaje con equipos Drone) y la fabricación e instalación de la placa conmemorativa serán financiadas con cargo a la anualidad 2020 de la subvención, mientras que el libro monográfico y la completa finalización del documental (rodaje de entrevistas y escenas, y fase de postproducción) se imputarán a la segunda anualidad de la misma en 2021.

“Se trata de crear contenidos que difundan la importancia, la significación y la historia de la industria conservera en Asturias, con una especial dedicación al ejemplo de la villa de Candás y a las mujeres trabajadoras. Profundizando en la identidad de la comunidad y en su memoria histórica. Con este proyecto se ampliaría el estudio, la conservación y la difusión del patrimonio material e inmaterial asociado a dicha industria. Sacando del olvido un pasado colectivo que apela a la identidad y a la memoria del pueblo de Candás abordando su discurso con un enfoque de género hasta ahora inexistente” – explicó Amelia Fernández.

“Los contenidos solicitamos subvencionar encajarían dentro de la capsula temática monográfica recogida en el Plan director, anteriormente señalado, concretamente la denominada “ El trabajo en las industrias conserveras. La mujer y la fábrica (enfoque económico-social-cultural)”. El personal de las fábricas de conserva estaba integrado en su mayor parte por mujeres. La mayoría eran esposas e hijas de pescadores. Ellas eran las que realizaban el proceso de manipulación y tratamiento del pescado fresco desde su entrada en la fábrica hasta su salida enlatado para su comercialización y consumo” – prosiguió Fernández.

El trabajo femenino era de carácter temporal y dependía de la abundancia o escasez de las costeras. Sólo eran llamadas a trabajar cuando en las fábricas había suficiente pescado. Normalmente trabajaban en jornadas de 10 horas hasta que en 1919 se implanta la jornada de 8 horas diarias o 48 horas semanales. El horario habitual era de 9 de la mañana a 2 de la tarde y de 3 a 6 de la tarde. Las entradas y salidas eran anunciadas por una sirena que se escuchaba a gran distancia. Cobraban el sábado de cada mes. Estas mujeres desarrollaban diferentes trabajos, aunque todas cobraban el mismo jornal. Unas supervisaban el trabajo de todas ellas y controlaban que todo funcionase correctamente, otras cocinaban las diferentes salsas, empacaban el pescado, cerraban y revisaban las latas, pegaban las etiquetas de las latas y las introducían en estuches de cartón o las apilaban en el almacén. El número de hombres que trabajaba en las fábricas era muy reducido (aproximadamente un 10 % de la plantilla). Su trabajo se caracterizaba por ser fijo y especializado, desempeñando el oficio de administrativo, latero, soldador, mecánico, fogonero o conductor. (enfoque económico-social-cultural).

“En Julio de 1938 aparecieron diez cuerpos en la costa de Bañugues. Entre ellos, cuatro mujeres que son enterradas en el cementerio de la localidad gozoniega. Sin nombres, ni documentos de identidad. Solo se tiene la seguridad de que son conserveras de las fábricas de Candás, como se deduce de la bata de una de ellas. Los cuerpos fueron arrojados al mar desde los acantilados de Cabo Peñas y posteriormente las olas los devolvieron a la orilla. Ochenta y dos años después, del hallazgo de sus cuerpos Carreño apuesta por recuperar y visibilizar su historia, las represalias y represión que sufrieron dichas trabajadoras para completar con estos trabajos el fondo fotográfico y fílmico del Ecomuseo que es necesario sacar a luz como una base fundamental y futuro recurso gráfico para mostrar a las generaciones futuras” – detalló la regidora.

El formato audiovisual y la publicación inédita, permitirán facilitar conocimientos, transmitir sensaciones, emociones y procesos complejos. De ahí la pretensión de rodar y crear contenidos en este formato. Los contenidos audiovisuales resultantes de este proyecto se presentarán, junto con los ya existentes (entrevistas a extrabajadoras y trabajadores de las fábricas, y pescadores que son testimonios de sus experiencias y cuentan, en primera persona, distintos aspectos de su trabajo), dentro de la sección Vidas en lata, que se mostrarán en monitores de TV en formato vertical. Los testimonios se presentarán en primer plano, mostrando cercanía e impacto al público visitante con la trasmisión de sus experiencias.

En la Casa de Cultura de Candás la periodista Marta Rogía se entrevistará con las familias de Les Candases, sin cuyo testimonio e implicación este proyecto no sería posible.